A partir del segundo semestre del 2008, comenzó a primar una mayor mesura y racionalidad a la hora de fijar los valores de la tierra, guardando una mayor coherencia con el valor de la producción de sus m2 de edificación, evidenciándose asimismo una mayor flexibilidad por parte de los propietarios en las negociaciones a la luz de la incertidumbre generada a partir de las repercusiones que la crisis internacional tendrá sobre la economía en general.
Por otra parte, comienzan también a verse de forma más frecuente la oferta de terrenos con planos ya aprobados y la venta de sociedades propietarias de la tierra y el proyecto.
Sin duda la realización de un lote que pueda transformarse en un edificio de propiedad horizontal no es sencilla. Menos aún dentro de un escenario en el cual comienzan ya a sentirse las turbulencias de la crisis internacional y de los problemas internos a los cuales se suma la particular situación de tener que atravesar durante este 2009 un año electoral.
No obstante, a pesar de que las señales aparezcan por ahora al menos contradictorias, el nacimiento de nuevos desarrollos constructivos residenciales no se detiene, se ha ralentizado por cierto, no tiene el mismo impulso que en años anteriores, pero ello no quiere decir que desaparezca la vocación por llevar adelante negocios inmobiliarios cuando aparece tierra en buenas localizaciones a valores adecuados. Los desarrolladores no dejan de investigar y estar abiertos a ofertas de tierra aunque, sin duda, obren de forma mucho más cautelosa que tiempo atrás sabiendo que hacia delante un error en el precio y modalidad de absorción de la tierra al negocio no será fácilmente corregido por un alza de los valores de venta del producto en el mercado.
ANALISIS Y PLANILLA EXCEL CON DETALLE DE 206 TERRENOS EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
© ReporteInmobiliario.com, 2003-2009, Lunes 16 de Febrero de 2009